martes, 23 de diciembre de 2008

HAY ALMAS Y ALMAS...

Sí. Hay almas y almas. Tantas como terrícolas. Lo dejo así que incluye mucho. Hasta lo que ignoro. Porque ¿qué sé yo si el fresno que veo desde mi ventana alberga un alma, verdad?...Y digo "tantas como" cuando puede haber bastantes más si consideramos que alguno de nosotros tiene más de una. Yo, realmente, no sé cuántas tengo ni dónde se esconden. Que van conmigo estoy segura. Se hacen notar. Les sirvo de medio de transporte y de continente. Al menos una tengo. Seguro. A veces me quedo totalmente inmóvil y hasta evito el parpadeo con la intención de localizar su escondrijo. Pero es más lista que yo. Y más ligera. Que para eso es alma. Y yo la llevo a ella además de cargar con mi cuerpo. Así que no hay forma humana de echarle el guante.
Me pregunto cuántas clases de almas habrá. Si tuvieran color, la mía sería de un rojoanaranjado porque os aseguro que es endiablada. Y esa forma tendría: de diablillo. Me las arma cada dos por tres. Y luego a arreglar el entuerto al psiquiatra. ¡Que vaya usted a saber cómo será el alma que porta ! Si es compatible con la mía tal vez me arregle algo. Pero si existen incompatibilidades...lo tenemos crudo.
A mí me habría gustado que me hubiera tocado un alma con forma de ángel, o de alguna figurita entrañable del belén...de esas que llevan serena y delicadamente , a veces hasta la quietud, alguna ofrenda al niño. De color azul...como esos cielos castellanos despejados que se dejan cruzar por bandadas de aves en viaje a cualquier lugar. Eso proporciona sosiego, paz, serenidad... Todo lo que a mí me falta porque mi alma carece de ello. Y como no son elementos de consumo pues no hay forma de adquirirlos...Claro que igual lo tiene en la reserva y la muy traidora no quiere hacerme la concesión. Sería capaz porque un poco la conozco. No en vano lleva conmigo toda la vida. Y lo cierto es que tengo la impresión de que no me llevaría bien con otra distinta. Está claro que somos animales de costumbres...
Y luego está lo de las almas gemelas. Yo sé (porque soy muy intuitiva y eso no se me escapa)
que mi alma ansía tener otra con la que quererse: reír, comentar entre ellas los efectos de las emociones con las que nos torturan, cotillear un poco , jugar al escondite...esto sí que tiene que ser dificilísimo. Porque esa forma de ubicarse en cualquier rendija de la entraña y a veces en varias a la vez, que parece que tienen el don de la ubicuidad, eso tiene que darles mucho juego. Ya lo creo. Claro que a lo mejor entre ellas , como conocen los trucos...supongo yo... Decía que mi alma puede necesitar de otra. Pero lo de "gemela", además de ser terrible para mi salud (me imagino cuando decidan el punto de encuentro en mi víscera), para ellas debe de ser un poco aburrido. Imagino dos diablillos de un rojo anaranjado. Tendrán vidas parecidas ¿qué van a intercambiar?. No. Lo de las almas gemelas no me parece buena idea. Pero claro, tampoco me apetece a mí que vaya a hacer migas con un alma negra cual noche sin luna, o de un blanco agrisado como esos cielos informes y húmedos que no dejan ver lo que hay detrás. Y mucho menos si se trata de un diablo amarillo enseñando una dentadura maliciosa de forma permanente. Que también hay almas así. Y parecen graciosas pero no son de fiar.
En fin. Que esto de las almas da para mucho comerse la cabeza. Que también una tiene de eso aunque le dé menos uso...
Karen Dinesen

11 comentarios:

belijerez dijo...

Lo tuyo es precioso y no eso de que el alma está en el cerebro. Mira, tu, incluso le pones color y cuerpecillo. El alma da para tanto y mucho más, eso seguro.

¿Te imaginas? ¿dónde estará el alma del PC? o alma lo que se dice alma no corresponde a un "bicho" como este.

Yo un día creí haber encontrado mi alma gemela. Juro que no fue nada aburrido, es más fue demasiado "ruidoso, ajetreado". a veces echo de menos a mi alma gemela, sin embargo es mejor vivir con un alma buena que gemela. Oye lo de buena es complicado porque no acabo de tenerlo claro, no se si es buena o condescendiente........ufff que lío otra vez empiezo a perderme.

Oye Karen, no me digiste nada sobre si el FMI interviene en el Congo y para qué. Pero bueno eso quizas no sea muy poético y si patético.

Karen Dinesen dijo...

Beli, voy a averiguar si el FMI tiene alma y a qué clase pertenece en caso de que la tuviera. Después vemos lo de El Congo.

Oye, a mí me parece que lo de la condescendencia como base de la pareja es una pésima idea.Fundamentalmente porque no suele ser mutua. Casi siempre acaba por hacer concesiones la misma persona. Habrá que ver como armonizar discrepancias o superar las disensiones...pero lo de la condescendencia...Yo creo que contribuye a anular lo que uno es.Y no sé si eso es bueno... Claro que estoy dando por supuesto que uno es objetivamente "buena gente"...y que sólo una parte sufre las concesiones...No sé.

Karen Dinesen dijo...

Beli, voy a averiguar si el FMI tiene alma y a qué clase pertenece en caso de que la tuviera. Después vemos lo de El Congo.

Oye, a mí me parece que lo de la condescendencia como base de la pareja es una pésima idea.Fundamentalmente porque no suele ser mutua. Casi siempre acaba por hacer concesiones la misma persona. Habrá que ver como armonizar discrepancias o superar las disensiones...pero lo de la condescendencia...Yo creo que contribuye a anular lo que uno es.Y no sé si eso es bueno... Claro que estoy dando por supuesto que uno es objetivamente "buena gente"...y que sólo una parte sufre las concesiones...No sé.

Karen Dinesen dijo...

Beli, tampoco tú me diste respuesta a ninguno de los interrogantes que planteé en mis comentarios hechos en la entrada anterior.Tal vez porque no la tengan...pero alguna referencia podrías hacer ¿no?...O es que en este caso ya te pierdes antes de empezar..?ufff qué lío! ¿verdad Beli?

belijerez dijo...

Acabaré por imprimir tus textos, dan para tanto...! Intento responder, ok? Cubrir carencias inutiles? está claro, una inutilidad.
Las demás cuestiones que planteas no las veo como preguntas sino como tus propias reflexiones y en ese caso son tuyas aunque en algunos casos comparto.
Lo que dices de la condescendencia también lo comparto. Encontrar alma gemela o no, el caso para mi es encontrar alguien que responda a mis muchos intereses y eso no es fácil, quizas porque me interesa mucho vivir.
Sabes que cuando se publicÓ la foto de la niña con libros entre los árboles y puso "sin comentarios" ese alguién me acababa de devolver dos libros que tenía mios desde hacía casi dos años? ....Anda ahora alimento tu espiritu cotilla, pero da igual. NADA ES AZAR.

Karen Dinesen dijo...

Beli, cuando hablaba de comentarios en la entrada anterior me expliqué mal. Estaba refiriéndome a mis respuestas a tus comentarios en mi entrada anterior.

Las preguntas que planteo al aire en mis reflexiones forman parte de las mismas y no esperan respuestas. Las que te hago a ti, sí.

Gracias por satisfacer mi curiosidad .¿Tú creías que el tal Jarillo me estaba enviamdo emails..? ¡Ni de coña! o no era eso?...

belijerez dijo...

No era eso. pero coo no puedo conectar contigo enprivado pues.....nos quedamos con la intriga.

Karen Dinesen dijo...

Beli, mi direción de correo. Ahí va: frukarendinesen@hotmail.com
Ya puedes comentar en privado lo que te parezca. No hay excusa ahora. Salud.

belijerez dijo...

El fresno tendrá alma, supongo.
Ver un fresno desde tu ventana es una suerte, para el fresno porque te fijas en el y para ti porque puedes verlo. Es un árbol importante, así será tu casa.
Disfruta y sigue escribiendo.
También yo disfruto leyendote.

Karen Dinesen dijo...

Beli,gracias por entrar de nuevo.No existe relación entre la casa y el fresno. No sé por qué tú la estableces. Pero sí existe entre el fresno y el entorno en el que se encuentran la casa y el fresno.Y hay otros muchos árboles...Me encantan los árboles, Beli. Incluso en invierno. Sus ramas sin hojas permiten ver a través de ellas los planos de paisaje que están tras ellos. Viéndolos a cierta distancia da la impresión de que sus copas son de encaje formado al entrelazarse y mezclarse las ramas, adquiriendo un color ceniza bonito, contrastado con la caliza, el verde o el azul del cielo en días despejados.La Naturaleza me embriaga, Beli.Me produce muchas emociones y me aleja de la parte cruda del planeta. Ésa de la que no puedes escapar, salvo que cierres los ojos y te tapes los oídos cuando tropiezas con la tortura de los medios de comunicación. Tampoco debes...escapar, digo. No debo dar la espalda. Pero a veces lo necesito, Beli.Forma parte de la terapia de recuperación.Me hace más efecto que las pócimas del psiquiatra. Gracias por escuchar, Beli.De verdad, gracias.

belijerez dijo...

Qué mejor terapia que unirse a la naturaleza, somos parte de ella. A mi también me encantan los árboles, la montaña, el mar.
Vivir en la bahía para mi es un regalo que la vida me ha hecho. de todas formas es constractado que equilibra los neurotransmisores tener sensaciones positivas y la naturaleza siempre nos la aporta, sobre todo cuando está en aparente calma.
Ahora es un tiempo del que disfruto mucho, en esta latitud, el invierno me seduce. Me enraiza.
Me renueva.

Es mi mejor terapia pasear en invierno, ver los atardeceres rojizos y sentir el aire frio en mi mejilla. Eso si que pne a pnto mi serotonina.