viernes, 28 de septiembre de 2012

QUE NO ME CONFUNDAN...

¡¡Lo que grité!! Todo lo que me permitió el constipado que me acompaña desde hace cinco días afectando a garganta, nariz y oídos. 
  Yo misma estoy sorprendida del enmudecimiento en que me sume este Gobierno. Porque mira que provocan... Si es que te ponen el capote cada día en las capeas de entrenamiento para dar broche a las mismas cada viernes con un cartel que ni José Tomás...Soraya, de Guindos y Montoro nada tienen que envidiar a la hora de hacer la faena. Para orejas, rabo y vuelta al ruedo.No lo hace nada mal a la hora de poner banderillas el resto del gabinete Ministerial.. Y el torero por excelencia que piensa poner una plica en Gibraltar: El Sr. Rajoy. La verdad  que, aunque éste diste de producir la simpatía del Mariano de Forges, no puede decirse que no sea digno merecedor de ser protagonista de viñeta.De humor negro, eso sí. No pueden provocarme risa la injusticia y la lapidación de las libertades.
 Inicialmente las acciones del Gobierno Rajoy me generaban indignación.A pesar de no creer en la efectividad de las manifestaciones, acudí a todas las que pude para dar rienda suelta a la rabia.Pero la resaca que traía consigo la ausencia de cambios en la política marianista fue sumiéndome en la desesperanza y la desesperación. 
 Cuando empecé a conocer de cerca los efectos de la misma en mi entorno más cercano, descubriendo rostros reconocibles en las colas de Cáritas,sentí que la ira daba paso a la tristeza. Una inmensa tristeza. Y una, que siempre cuestionó la función de las ONGs aunque el poso religioso de la educación recibida la llevase a colaborar de forma renuente para compensar la contradicción, pues una, la que suscribe, se alivia ante la existencia de Cáritas y Cruz Roja cuando les proporciona un bote de Colacao y dos paquetes de arroz a un padre de familia.Y lo más tremendo es que esto es sólo una anécdota en el conjunto de las desmedidas medidas por las que, cínicamente, piden disculpas a quienes joden.No puedo con ello.
  Pero, por primera vez, tomo plena conciencia de que las palabras, arma por excelencia en democracia, no sirven para nada. Es por ello que me han dejado sin ellas. No porque no las tenga apiladas para lanzárselas con tirachinas si de algo sirviera. Sino porque la toma de conciencia de la inutilidad de las mismas y de cómo las injusticias y el cercenamiento de la libertad vienen de mano de la democracia  me dejan totalmente inerme.
  Lo que ya colmó el vaso de mi indolencia inducida fue la loa de Mariano Rajoy a la mayoría silenciosa. Fue entonces cuando abrí la ventana de la habitación y de mi boca, a modo del Grito de Munch, salieron rayos y centellas.No puedo permitir que el abatimiento y el estado de hibernación en el que se encuentra mi voz acabe por incluírme en semejante banda. Que no me confundan...
 K.D.

8 comentarios:

Alipio dijo...

Estimada Karen: no se que decirte. Tienes toda la razón, pero ya sabes -y reconoces- que la razón y las palabras no sirven para nada.

Una de las pocas ,y ciertas, enseñanzas de la tristemente famosa Guerra fría, es que la negociación solo es posible desde posturas de fuerza que "acojonen" a las partes.

Y el resto, buenas palabras, brindis al sol y cerveza para celebrarlo.


Quizás algún día los borregos se decidan a salir del redil.

Saludos y ánimo.

Karen Dinesen dijo...

Gracias por tu compañía y tus palabras, Alipio.
La reflexión que haces sobre la "Guerra fría" es totalmente acertada.
Y ¿qué capacidad de acojone tiene un pueblo cada vez más acojonado?...
Un abrazo.

Miner dijo...

Efectivamente las palabras no sirven para nada si no van acompañadas de las urnas y en este caso, los que se quedaron en casa (todos son iguales) y los que votaron a la opción de la derecha, por ignorancia o por creerse que no pertenecen a la clase trabajadora, propiciaron la llegada de esta gente al poder. Y todavía los justifican con lo de "La herencia recibida"

miembro dijo...

Sólo darte uno besitos, .....pa qué hablar.

Más besitos.


PD; me he vuelto hortelana y este año estoy trabajando un huerto, aprendiendo inglés y alguna otra cosilla. El blog abandonado por aquello de las "palabras".

miembro dijo...

Perdona me ha salido mal, el anterior comentario es mio...jejeje Belijerez.

Anónimo dijo...

......

Bely dijo...

...

Cuentera personal dijo...

Gracias Karen:
Porque aunque muchas veces pensemos que las palabras no sirven de nada, en algún momento alumbran, en un principio tal vez con la intensidad de una cerilla en medio de la oscuridad, pero también pueden crecer y brindar el calor de una buena hoguera.