¿¿¡¡ A que parece una fabulación!!?? Pues que no lo es, oiga!!
El dinero, cuando se
convierte en interés prioritario y mira hacia otro lado ante la indignidad, no
puede ser la justificación del buen rollito en las relaciones .
En los últimos años se ha
venido estrechando la relación entre España y los EAU, y más concretamente con
Dubai, en aras del desarrollo económico de nuestro país. Y además de crecer en número
los negocios españoles en aquellos
países, aumentar las exportaciones, participar de exposiciones internacionales
y eventos organizados en los Emiratos de
forma exponencial hasta el punto de que las líneas aéreas entre las zonas
funcionan actualmente con fluidez, Dubai se ha convertido no solo en lugar
idóneo para inversiones sino también en destino turístico de lujo para una
élite de españoles que pueden permitírselo.
Pues bien. Supongo que una
mayoría de nosotros, si no todos, somos conocedores del castigo que ha recibido
una joven noruega, Marte Deborah Dalelv, por haber sido violada
y hacer uso de su derecho a denunciar el hecho:
16 meses de cárcel . La indignación aumenta cuando el deleznable
tribunal que juzga el hecho aduce que la causa es “tener sexo fuera del
matrimonio”. Si además se adentra una en el conocimiento del vejatorio proceso
al que la mujer ha sido sometida al intentar
llevar a cabo la denuncia (los responsables del hotel intentan echarle una
manita advirtiéndole para que se lo piense, preguntándole si está segura de lo
que va a hacer), acabando lo que supongo que todos consideramos un derecho
fundamental, en una pena de 16 meses de cárcel además de pasar a incrementar la
lista del paro, ya que fue fulminada inmediatamente por la empresa para la que
realizaba su trabajo , no creo que esté magnificando el asunto cuando me
pregunto si algo así no merece una reprobación pública por parte de cualquier gobierno, de cualquier
país que pretenda reconocerse en su dignidad. Llegaría yo hasta la amenaza con
la ruptura de relaciones si no piden públicamente perdón por semejante
ignominia.
Pero yo soy una ingenua. Y
encima la chica es noruega. Si al menos fuese de Valladolid…
Victoria J. (K.D.)
(En la imagen,subida de Internet, Marte Deborah Dalelv)