domingo, 8 de enero de 2012

A LA CAZA DEL OPTIMISMO (II)


No es el tiempo el que mata la ilusión.

Hay ojos que ríen a los noventa

y apagadas sonrisas en los treinta.

No es de la angustia el tiempo la razón.


Del cansancio aprovecha la ocasión

y de la edad obtiene buena renta

si ya sobrepasados los cincuenta,

al ver ya reducida la ración,


centras en lo que falta la visión.

Y la visión de tal nos desalienta.

Hay que fijar tan solo la atención


en aquello que queda y que nos tienta.

Aliñado ese resto con pasión,

veréis a la sazón qué bien nos sienta.

K.D.

No hay comentarios: