“Yo entiendo que tengas
ganes de hablar pero estoy viendo el partido…”(voz en off)
Por eso vomito aquí. No deja
restos ni olor. Lo de vomitar en el blog resulta muy limpio además de eliminar
el malestar de una mala digestión o la
ingestión de elementos con altas dosis de toxicidad. La noticia de ayer en el
informativo de la Sexta se encuadra en el segundo de los supuestos.
La presentadora ,sonriente y
complacida, nos pone al corriente de algo que alienta el espíritu a juzgar por las imágenes de “entusiastas
recicladores” a la búsqueda de “un reciclo”, que viene a ser algo así como un
punto para ir cubriendo una cartilla como la que tenía mi güela del SPAR. Según
los puntos que logres tendrás un premio.
La cosa consiste en
introducir en el móvil una nueva aplicación para- dice la presentadora- “incentivar el
reciclado” de residuos. Incentivos para generar conciencia está bien. Sí. Que a
mi me parezca que lo de incentivar el reciclaje a costa de favorecer el desarrollo de una “conciencia” consumista que
genere más residuos, no sería la forma más adecuada de educar en la
sostenibilidad, pues es fruto como
siempre de buscarle los tres pies al gato. Que ya empieza a convertirse en una
manía insoportable. Incluso para mí misma.
Cada vez que alguien o “alguiena”
(niños, jóvenes adolescentes, adultos adolescentes, viejos adolescentes…toda
clase de adolescente en general), una vez activada la aplicación en cuestión,
acerca su móvil al código de barras del envase a desechar y posteriormente hace
lo mismo en el código que vendrá estampado en el contenedor de residuos a
reciclar…¡se obtiene un reciclo!. Que viene a ser como un punto, una moneda virtual
a tal efecto …con la finalidad de ir acumulando “reciclos” y poder acceder a un
premio “sostenible”: un bono para usar una bicicleta, un monopatín…o sea,
podríamos decir premios ecológicos.
Y yo intentando educar a los
rapacinos haciendo rutas por el bosque abriendo los sentidos y la entraña a
cuanto nos ofrece, y pensando que el premio era eso. Y mirar al cielo y darse
cuenta de que esta cúpula no tiene parangón. Y lanzar la vista hasta el
horizonte, comprobando que no hay pinacoteca que pueda colgar en sus paredes lo
que nuestros sentidos captan en ese instante único. Y saber que podemos hacerlo
cada día y será distinto… Y cogerle aprecio a la tierra y lo que alberga,
siendo conscientes de la criba que tendríamos que hacer con la cantidad y
cantidad de cretinos que tienen sitio en ella. Aunque podríamos obviarlos si
nos centramos en lo importante. Porque yo estaba en la idea de que solo mimas
aquello que quieres, que aprecias, que te produce satisfacciones…y confiaba en
generar ese sentimiento hacia el
medio e invertir las querencias, apreciando
lo que se desprecia y tratando bien lo que se maltrata.
Eso me pasa por desconfiada
y retrógrada. Con lo fácil que lo tienen quienes sean con la aplicación del
móvil. Habrá colas en los contenedores, aumentará el consumo de coca-cola y, si visteis el anuncio (maravilloso, todo
hay que decirlo) de Estrella-Dam, también la cerveza irá en aumento. Y los
tarros de miel que yo reutilizo para introducir en ellos las legumbres, por
ejemplo, pues también al contenedor del vidrio. Que de aquellas “tres erres” de
la máxima para la sostenibilidad, creo que la de REUTILIZAR y REDUCIR los
residuos están de más. Igual no es el momento. Estamos en la fase de
incentivar el RECICLADO consumiendo
y consumiendo todo lo que lleve envases. Nada de reducir. Nada de reutilizar.
¡A por los puntos!
Buenas noches.
Que la Fuerza nos acompañe.