domingo, 9 de septiembre de 2012

QUÉ COSAS!!


¿Me  regalas unos minutos para poner tus oídos al servicio de mis chismes?  Te los pongo por escrito. O sea que mejor te pones las gafas ya que lo que tendrás que utilizar, en este préstamo sin intereses que me concedes, será tu vista.

Verás…que estaba yo escuchando las noticias en el Informativo de la 1 y escucho a la Directora de un centro de Enseñanza explicar cómo este curso los niños no comprarán libros de texto. La crisis les ha empujado a recopilar libros de texto diversos de años anteriores, que  formarán parte de la Biblioteca de aula; y los alumnos desarrollarán el aprendizaje a través de la consulta de los mismos, elaborando simultáneamente su propio libro en el cuaderno mediante la realización de actividades diseñadas y sugeridas por el profesor.

Desde hace treinta años, y hasta la entrada en vigor de la LOGSE que en vez de darles puerta a las Editoriales si no cambiaban el chip les abrió la puerta grande para que continuaran haciendo chapucillas, una, la que suscribe, con algún otro docente, todos políticamente incorrectos, veníamos a bordo del barco de Ulises escuchando los cantos de sirena de las diversas y complementarias teorías sobre el aprendizaje y tejiendo  las redes de  nuestras quimeras para aguantar la travesía. Esperábamos llegar a Ítaca y encontrar la piedra filosofal que nos permitiera llegar a ser gestores de nuestra propia acción educativa, o en su defecto llegar a desarrollar  la docencia con cierta decencia, aprendiendo de puerto en puerto.

Fue un trabajo duro pero gratificante. Nos pasaban las horas sin enterarnos buscando recursos metodológicos, materiales…En la búsqueda recogimos buenas cosechas…Los alumnos de entonces, excelentes profesionales hoy en ejercicio o en paro, nos lo confirman cuando nos intercambiamos risas y abrazos en algún encuentro casual. Nos costó mucho trabajo convencer a sus papis de que el hecho de que no tuviesen un libro concreto de texto con sus ejercicios y enmarcados, no les impediría el acceso a la búsqueda de información sino todo lo contrario. Les proporcionaríamos múltiples fuentes de información abriéndoles un enramado de vías para acceder a la misma en lugar de restringirla al contenido escaso de un libro de texto, además de intentar enseñarles a utilizarla. Entre los diversos recursos tendrían una biblioteca en el aula con abundantes libros de consulta además de la autopista que empezaba a brindarnos la tecnología.

Pues bien. Fue bello mientras duró…Algunos de los embarcados iban literalmente así: embarcados. Navegantes a la fuerza. Y no aguantaron el tirón. Un alto en el camino para votar si seguir o cambiar el rumbo y volver a casa. Ganó la implantación de un libro de texto… por mayoría. 

No pude evitar un atisbo de sonrisa a modo de mueca incompleta al escuchar hoy la noticia en la tele. “Trabajarán con libros diversos de texto que les servirán de consulta  y elaborarán su propio texto”. Algo así explicaba la Directora que pretendía trasladar la idea de rentabilizar los recursos en los tiempos adversos que corren para la economía, evitándoles el gasto a los padres. 

Mira por donde  la reducción del gasto público va a traer como consecuencia la necesidad de que cada profesor sea gestor de su propia acción educativa.

Va a ser verdad el dicho: Dios escribe derecho con los renglones torcidos.   

K.D.

3 comentarios:

Alipio dijo...

Un placer volver a leerte, Karen.

Y totalmente de acuerdo contigo.

Yo siempre he sido de la opinión de que lo propio es enseñar a pensar y a tener sentido crítico antes que a "empollar" unas materias con el único fin de aprobar.

Y ahora, con Internet, se hace más necesario si cabe, para evitar "tragar" con todo lo que hay.

Saludos.

Luis Simón Albalá Álvarez dijo...

B I E N R E G R E S A D A

Karen Dinesen dijo...

Gracias, Alipio.
También a ti, Luis Simón.
Sin embargo, como podéis comprobar, la sequía continúa.
Me están dejando sin palabras.Echo de menos disponer de una varita mágica.Y de ésas solo existen en la ficción.
Aunque bien mirado, tendré que escudriñar en el entorno ya que "de ficción" parece a veces lo que está pasando. O igual es que me cuesta creerlo.
Abrazos.