Escuchaba a una concejala de
Gijón , del grupo de CIUDADANOS, elogiar la función social que cumplió la Universidad
Laboral de Gijón “permitiendo a los hijos de familias humildes lograr un futuro
profesional”. ¡Claro que sí!
En lo que se refiere a Educación,
los “intelectuales franquistas” que se ocupaban de tan encomiable labor, eran gentes “biienpensantes”, en todos
los sentidos de la expresión.
Podrían haber hecho que la
Enseñanza fuera obligatoria y alcanzase más allá de los diez añitos la
formación para todos los “españolitos que vienen al mundo los guarde Dios”
(permítame la licencia Don Antonio…). Y aprovechar para disponer de Institutos que facilitaran el acceso gratuito al
Bachiller de los “hijos de familias humildes” como dice muy bien la Señora o Señorita
Concejal de Ciudadanos. Pero “pa qué, pa qué, pa qué”….Podrían disponer de
edificios adecuados para tal…haberlos, habíalos…. pero mejor estaban ocupados
por los hombres de camisa azul y corbata a juego del Sindicato Vertical . Y de la educación ya se ocuparían los
Colegios Privados de Monjas y Curas que para eso estaba el clero fundando y
fundando hasta en los lugares más alejados , reforzando la labor del Párroco de
turno.
Bien…Pero no se olvidaron de
la clase obrera. ¡Claro que no! No fuera a ser que se extinguiera…Y así, para
que los hijos pudieran continuar la tradición, se establecieron las
Universidades Laborales que darían a España profesionales bien formados para
trabajar en la Industria, por ejemplo. No como ingenieros,no, aunque alguno se
les escapó. Estos,los ingenieros, salían de la “Universidad a secas”. Sin apellido. Esta iba en paralelo a la otra, permitiendo
igualmente que las élites sociales mantuvieran también la tradición para evitar
discriminaciones. Y así las cosas funcionaban como debían: Papá médico, hijo
médico. Papá albañil, hijo con dos opciones: albañil o fresador, por ejemplo.
Que UNINSA ya estaba en marcha…
Y algunos, algunas teníamos
abuelas , padres, madres, tíos , todos ellos necios y enamorados de la
Institución Libre de Enseñanza y aplicados
discípulos del Ateneo Obrero del pueblo
hasta el 36 ( llegó el general y mandó parar). Y se partieron los cuernos para
poder costear los estudios de
Bachillerato en el Colegio de monjas del pueblo. Y así alcancé yo el Magisterio que ansiaba mi abuela.
Tres años, con la beca apoyando la economía familiar, podían llevarse en casa
sin tener que prescindir de lo que suponía una vida digna para todos.
Así que, Señora o Señorita
Concejal o Concejala, una que lo soy, hija y nieta de familia humilde, tuve
acceso al Bachillerato sin apellido, gracias al gusto por el estudio y la claridad de
ideas que caracterizó siempre a mi
familia, republicana por opción. Que eso cuenta a la hora de establecer
prioridades…
Y le chivo que algunos, bastantes…de los
que accedieron al generoso Bachillerato Laboral, además de lograrse un futuro
en el trabajo, pasaron a formar parte de la masa obrera que contribuyó a
socavar los cimientos del “Sindicato
Vertical”. ¿Ve "usté"? Hay gente que utiliza
los favores como un “boomerang”. Desagradecidos…
Salud y República
Que la Fuerza nos acompañe.
1 comentario:
Estas palabras que reproduzco , las pronunció Girón de Velasco, Ministro de Trabajo del Régimen ( y más) que impulsó (y más) la Universidad Laboral de Gijón (y más), refiriéndose a los “loables” objetivos que se perseguían con la creación de la misma (y más)…
…“formar, además de OBREROS mejor preparados técnicamente, hombres de arriba abajo, capacitados para las contiendas de la inteligencia, entrenados para los combates del espíritu, la política, el arte,el mando y el poder.” (José Antonio Girón de Velasco)
Tan ambicioso proyecto, en manos (como no) de la Comapañía de Jesús. (Léase jesuítas)
Las encontré hoy en la prensa local, al hilo del debate sobre la intención de solicitar la designación de Patrimonio de la Humanidad ( no sé si cultural, histórico…en serio que ni lo sé ni me importa mucho).
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